LA PALABRA DE DIOS DEBE ESTAR EN LA VIDA DE LA FAMILIA Vv. 6-7 “Grábate en el corazón estas palabras que hoy te mando. Incúlcaselas continuamente a tus hijos. Háblales de ellas cuando estés en tu casa y cuando vayas por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes” Estos versículos y los que siguen 8 y 9 son cruciales en la crianza de los hijos. Cuando se refiere Dios a este asunto comienza con los padres, no con los hijos.
(1) Primero, Dios dice en este mandamiento: “mi palabra debe estar en tu vida y después en tus hijos.” Demos ejemplo a ellos, si quieres que ellos amen a Dios y le obedezcan. Tenemos que comenzar con nosotros como padres. La primera tarea de la paternidad es esta: “Ama y obedece a Dios”. -Entonces La palabra clave en este asunto es la —autenticidad—. Los padres no tenemos que ser perfectos, pero tenemos que ser auténticos, veraces. Seamos el tipos de persona, que deseamos que sean nuestros hijos. Quieres tener mejores hijos entonces mejoremos como padres. Porque La esencia de la paternidad no es lo que hacemos, sino lo que somos. Así que la meta no es cambiar a los hijos con regaños y castigos, sino que debemos dar el cambio nosotros con la ayuda de Dios. Albert Schweitzer, fue un brillante filósofo, matemático, y médico, fue por algunos años médico misionero en Africa. El dijo en una ocasión: “Solo hay 3 maneras de enseñar a un hijo: la primera es con el ejemplo, la segunda con el ejemplo y la tercera con el ejemplo.” Observa a tus hijos. Sean niños, muchachos o jóvenes, así somos nosotros como ellos porque son nuestro reflejo. Ciertamente criar hijos, es una tarea ardua, cuesta, se necesita más sabiduría de la que tenemos, con ella sin embargo de alguna manera, la tarea es simple, no es complicada ser padres, solamente necesitamos ser la persona que Dios quiere que seamos: Un papá o una mamá que ama a Dios y obedece a Dios, recibirá la bendición de Dios en este rol. Eso nos lleva a ser la clase de persona que deseamos que nuestros hijos sean.
(2) La Palabra debe gobernar todo lo que hacemos: Vv. 8-9 “Las atarás a tus manos como signo, llévalas en tu frente como una marca, escríbelas en los postes de tu casa y en las puertas de tus ciudades.” Algo similar: -todo lo que hacemos con nuestras manos debe ser bueno. -Y todo lo que pensamos, debe ser lo conveniente (nuestra frente) -todo lo que hacemos en privado, dentro de nuestra casa debe ser adecuado, armonioso y justo -y en público (las puertas o entradas de la ciudad) buen testimonio.
Enseñemos la palabra, comienza con tus hijos, sé perseverante y continuemos con otras personas.
