Salmo 9 De David

Este es un salmo de nostalgia, recuerdos y de pesar por la muerte de su hijo. Hay elemento imprecatorio, petición de venganza sobre sus enemigos que lo han acosado.

El salmista como hombre de fe inquebrantable se refugia en su Señor, para tener victoria sobre sus pesares, angustias, tribulaciones y sufrimientos físicos que lo llevaron casi a la muerte. Nunca perdió la esperanza de salir victorioso ante tantos males. Su fe lo mantuvo firme, y el Señor escuchó sus ruegos.

David nos enseña y nos aconseja que nos mantengamos firmes en Dios como nuestro refugio, porque Él: 

“Será refugio del oprimido”, “Refugio para el tiempo de angustia” “El Señor no desampara a los que le buscan” “No se olvida del clamor de los afligidos” “Porque Él levanta  de las puertas de la muerte” “El Señor imparte justicia” “Nunca se olvida del necesitado”.

La alabanza y el reconocimiento de quien es Dios salta a la vista desde el primer verso y continúa en el verso once y catorce, donde pide que sea proclamado entre los pueblos de la tierra, esto es un elemento misionero que fue el propósito de Dios para que Israel fuera de testimonio entre las naciones, hablando de Él como el único Dios, Señor y Redentor.

Él es el vengador de los explotados, del inocente y del afligido, al Señor se le conoce porque es impartidor de justicia.

¡Bendito sea Dios! Quien es refugio de todos los que creen y dependen de Él en todo tiempo.

Búscalo, es tu única esperanza, confía en Él y Él hará, para que salgas victorioso ante la situación difícil que vives.

Es mi oración.

– Pastor Orel Ochoa (extraído del libro Meditaciones en los Salmos del Rey David)

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