“…canten salmos, himnos y canciones espirituales a Dios, con gratitud de corazón.”

Apóstol Pablo a los colosenses 3:16

Consideremos las recomendaciones con sabiduría y con la comprensión necesaria para que podamos sacar provecho en la aplicación que hagamos de ellas.

La segunda recomendación del apóstol a sus lectores es la práctica de la adoración a Dios por medio de la alabanza, y la gratitud. Es inspirador oír cantar a los fieles, al Señor; cantos diferentes, sean salmos, himnos o cantos contemporáneos, nos mueven nuestras emociones. Si estamos tristes producen alegría, si estamos preocupados producen ánimo para enfrentar toda incertidumbre, y adversidad, si estamos felices producen mayor gozo y felicidad. Toda alabanza nos llenará de gratitud al Señor por todos sus beneficios.

Disfrutemos de la adoración a Dios si lo hacemos solos o en la reunión de la comunidad de creyentes. Es maravilloso vivir en la palabra de Dios y es excelente cuando lo adoramos.

Lee Colosenses 3:16-17