Jesús  les dijo en cierta ocasión: “Aprendan de la higuera esta lección: tan pronto cuando se ponen tiernas sus ramas y brotan sus hojas, ustedes saben que el verano está cerca. Igualmente, cuando vean que suceden estas cosas, sepan que el tiempo está cerca, a las puertas. Les aseguro que no pasará esta generación hasta que todas estas cosas sucedan. El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras jamás pasarán (Evangelio de Marcos 13:28-31).

Posiblemente te has preguntado ¿y cuál es la señal de la higuera? Hace algunos años leyendo a escritores renombrados sobre profecía bíblica, aprendí que la higuera es la nación de Israel. Si observas la historia contemporánea del pueblo judío, Dios les concedió el retorno a muchos de ellos, miles y después millones a la tierra que aún tenía el nombre de Palestina, la tierra prometida a sus ancestros Abraham, Isaac y Jacob. El nombre de esta tierra fue cambiada con el nombre de Estado de Israel y se inicia en 1948. Han pasado muchos eventos desde ese año hasta el 2021 en que estamos ya viviendo. Persecuciones contra el pueblo de Israel, política injusta de parte de las Naciones Unidas, boicot, antisemitismo, guerras, odio de los palestinos y otros países árabes, asesinatos a judíos, misiles enviados a la tierra de Israel, ataque de los grupos terroristas que están en el Líbano y en Siria, etc., Jesús el Cristo nos advirtió de la higuera, que cuando la observáramos nos daríamos cuenta que el verano estaría cerca. En el futuro la higuera sufrirá aún mayores cosas y será su tiempo de redención. Llegará la gran guerra llamada armagedón. El apóstol Pablo dice que se salvará del exterminio el remanente judío y será redimido por el Mesías lo cual prometió (a los Romanos 9:27-28). En su primera venida lo rechazaron y pidieron a los romanos que lo crucificaran y así murió, pero al tercer día Dios su Padre lo resucitó de entre los muertos. A los cuarenta días de resucitado ascendió a los cielos, antes prometió a los suyos que volvería por su pueblo, formado desde que Él se fue, de judíos y gentiles. La Iglesia llamada universal. Los escritores del Nuevo Testamento y los seguidores de Cristo de todos los tiempos tenemos presente esa promesa. El apóstol Pablo dice que será repentino el arrebatamiento de los fieles seguidores de Cristo para encontrarnos con en Él en las alturas (1a. de Corintios 15:52).

Faltan ciertos eventos para que se cumpla el regreso de Jesús a la tierra por segunda vez: la aparición del falso profeta, el anticristo, el arrebatamiento, la gran tribulación y otras señales. Cada evento es seguido con prontitud por otro. Siete años finales del gran mal sobre la tierra y entonces aparecerá y todo ojo lo verá. “Prepárate para venir al encuentro de tu Dios, Señor y Salvador” (Amós 4:12; Mateo 24:44; Lucas 12:40).

Lee 1 Corinitos 15:50-54, Marcos 13:26-37