El cuarto asunto que menciona el profeta Isaías es que:
D) El Mesías se sentará en el trono de David (Lucas 1:32-33). Tendrá un reino eterno de paz y justicia. Su reino no tendrá límite y permanecerá para siempre, eso está en el futuro, cuando Él regrese a la tierra. (Daniel 7:14, 27; Miqueas 4:7; Lucas 1:33, Apocalipsis 11:15)
Y el último asunto que trata el profeta que:
E) Todo esto se logrará por el celo del Señor (Yehova) de los ejércitos. Él gobernará, porque Dios lo prometió, por su celo soberano el reino se establecerá. Isaías no captó el período del tiempo que transcurriría entre el primer advenimiento del Mesías naciendo en Belén y su segundo advenimiento o su regreso a este mundo. Dios no estableció su reino cuando vino a nacer en Belén en la persona de Jesús, porque era necesario el sacrificio de Jesús como Salvador y libertador por el pecado del hombre, hasta que Él regrese, Dios cumplirá su promesa (1 Pedro 1:10-12).
Isaías 61:1-3 describe la venida del Mesías y lo que hará. Qué futuro glorioso nos espera a los que caminamos en la luz de Cristo. Cuando en la vida se vive en la oscuridad, debido a cualquier razón, se debe considerar este escrito del profeta Isaías de caminar en la luz ya no en las tinieblas. Porque Cristo es luz debemos ayudar a otros a salir de la oscuridad, es una oportunidad que tenemos cada año al celebrar la navidad. La gente se distrae en lo superficial de esta celebración, debemos ayudar a los que más podamos. Llamemos por teléfono en estos días a los familiares, amigos y conocidos para saludarlos, felicitarlos y compartir con ellos esa luz de Cristo, el evangelio de amor, confirmarlos en la fe y los que están en la sombra reciban la luz.