Fuera del hogar

Cuando el esposo y los hijos salen del hogar para cumplir con sus obligaciones de trabajo y estudio, la mujer queda completamente aislada realizando las tareas domésticas, provocando a corto o mediano plazo soledad, aburrimiento y en casos depresión. Otras esposas manejan ese tiempo para avanzar en otros estudios o aprendizaje de un idioma o para crear un negocio desde su casa, eso está dando magníficos resultados en todos los aspectos.

Juventud divino tesoro … pero produciendo

Actualmente las familias de la clase media y baja; los hijos adolescentes y universitarios están actualmente aprovechando las oportunidades para ganar dinero por trabajos de medio tiempo o por horas según su plan de estudio, esto permite mejorar la economía del hogar y no ser una carga de cien por ciento a sus padres. Esto es loable porque ellos valoran lo que cuesta ganar el dinero y/o administrar mejor los recursos del hogar.

Un desafío 

Dios bendice a las familias que aprovechan las oportunidades para mejorar su economía, porque Él desea que se viva con lo necesario y no con lo indispensable. La prosperidad llama a la puerta de los buenos administradores, que obedeciendo a Dios a recibir sus enseñanzas, principios y consejos emanados de las Sagradas Escrituras lo ponen en práctica. El Libro dice: “que Él da el poder para hacer riquezas”. Advierte: “si fueres perezoso en el día del trabajo, tu fuerza será reducida.” Pide: “dame la primicia de tu primer salario o ganancia.” “Dame el diezmo de lo que ganes y abriré la ventana de los cielos y derramaré bendición sobre ti, hasta que tengas abundancia.”

Lee Proverbios 24:10, Malaquías 3:10