DIGNIDAD “Es la cualidad del que se hace valer como persona. Se comporta con responsabilidad, seriedad y con respeto hacia si mismo y hacia los demás y no deja que lo humillen, ni lo degraden.” Se valora a sí mismo, eres valioso, tienes honor. Dios nos dio dignidad, nos valoró tanto que desde el vientre está con nosotros eso dice el Salmo 139:13 al 16 “Tú creaste mis entrañas; me formaste en el vientre de mi madre ¡Te alabo porque soy una creación admirable! Tus obras son maravillosas, y esto lo sé muy bien. Mis huesos no te fueron desconocidos cuando en lo más recóndito era yo formado, cuando en lo más profundo era yo entretejido. Tus ojos vieron mi cuerpo en gestación…”

Así, tu dignidad o valor está determinado por:

  • Que eres creación de Dios.
  • Por lo que Jesucristo hizo por ti — Porque por medio de Él eres hijo de Dios. — Porque su Espíritu está dentro de ti.
  • Porque tú eres heredero de la vida eterna y coheredero con Cristo Jesús.

SE RÍE SIN TEMOR AL FUTURO

No tener temor en estos versículos significa: que no estás inquieto; no tratas de huir de aquello que te atemoriza. No tienes miedo a la incertidumbre del futuro, aunque no puedas visualizar lo que deseas. Dios nos ayuda a afrontar nuestra inseguridad y nuestros miedos. Su compañía nos hace fuerte y valientes y en tu caso te da libertad para reír sin temor al futuro. Así que cuando reflexionas hacia ese futuro cercano o distante te ríes, eres realista, pero con optimismo de que todo lo podrás porque Cristo te fortalecerá en todo momento. La risa genuina es aquella que te trae el gozo de la vida, la satisfacción de que todo está saliendo bien. Esta noche antes de dormir dale muchas gracias a Dios por lo que Él ya te ha dado, así como por su promesa: que nunca te dejará al enfrentar las situaciones difíciles, siempre te apoyará. En la enfermedad su Espíritu te consolará, si tu enfermedad no es para morir según la voluntad de Dios, Cristo Jesús te sanará y te ayudará a recuperarte. Decide ser alegre o gozoso. Hay una promesa en el Salmo 21:6, Dios llena de alegría: “Has hecho de él manantial de bendiciones; tu presencia lo ha llenado de alegría.” -NVI

Lee Salmo 139:13-16, 21:3-6