“El que es honrado en lo poco, también lo será en lo mucho; y el que no es íntegro en lo poco, tampoco lo será en lo mucho.” ~palabra de Jesús.
Evangelio de Lucas 16:10
En los capítulos 14,15,16 de este Evangelio de Lucas, Jesús el Señor narró algunas parábolas, método que usaba para enseñar sobre su reino y sobre las condiciones que deberían tener los súbditos del reino. Los cuales eran principios o verdades prácticas que deberían aceptar y practicar. Cada parábola tiene una conclusión que se presenta como invitación para tomar una decisión. Algunos de sus oyentes tomaban la correcta decisión y otros enojados por lo que escuchaban o por la conclusión, no lo hacían. En todo discurso sagrado hay siempre una conclusión en la cual hay que tomar una decisión, “para ser hacedores de la palabra y no tan solamente oidores.” Y el oidor es responsable de lo que ha escuchado sin excusa alguna, porque es palabra de Dios, el predicador es solamente una voz, usado por el Espíritu Santo quien lo ilumina para interpretar correctamente las Sagradas Escrituras, y es el primero en ser responsable en aceptar y aplicar esa palabra a su vida.
La Biblia nos habla en muchos versículos sobre nuestra responsabilidad de ser buenos administradores o mayordomos de los recursos que recibimos como bendición de Dios. Algunos, a veces practican una regular administración, otros no la practican y pocos se esfuerzan en ser buenos administradores. La observación nos dice, que quienes son cuidadosos y esforzados en la administración de sus bienes o dinero, producto de su trabajo, negocio o empresa, son prósperos, no sufren de escasez, su familia es bendecida, la obra de Dios lo es igualmente y otros más son beneficiados. Porque ellos son confiables para Dios y El los prospera aún más.
Continúa…
Lee Lucas 16:1-15