Tercera Disciplina. Dice el apóstol Pablo: “Denle gracias”, dentro de la oración que hagamos seamos agradecidos, al presentarle a Dios nuestras peticiones debemos darle gracias por oírnos y por su respuesta, y cuando esta llega no debemos olvidar ser agradecidos. A veces somos injustos y no lo hacemos. — La gratitud es el sentimiento de valoración y estima de un bien recibido, espiritual, moral, material o sanidad física. — La gratitud debe expresarse porque es un sentimiento, no es una obligación o compromiso, debe ser espontánea. — La gratitud es una emoción que nos conduce a pensar en las cosas buenas de nuestra vida y sentirnos agradecidos por lo que tenemos, por lo que recibimos de parte de Dios y de nuestros seres amados. — La gratitud es una actitud de alabanza a Dios y adoración en nuestro corazón. (Lucas 17:15-16 el leproso) —Seamos agradecidos.

La última disciplina: (v. 8) “Piensen en todo lo que es verdadero, en todo lo que merece respeto, en todo lo justo y puro, en todo lo amable, en todo lo digno de admiración, en todo lo excelente o merezca elogio.” Estas recomendaciones del apóstol Pablo son virtudes emanadas de nuestra relación con Cristo quien es nuestro ejemplo en todo. Las virtudes son disposiciones de la persona al actuar con sus semejantes. Cualidades de proceder que se relacionan con el actuar justo y correcto de las personas. Son disposiciones del bien, del entendimiento y de la voluntad que regulan nuestros actos, nuestra conducta, según la razón y nuestra fe en el Señor. Hagamos lo propio en la práctica de esta disciplina, aplicando estas virtudes.

CONCLUSIÓN. Ante la situación que estemos viviendo, No te preocupes, mejor ponte a orar cada día por la misma petición o peticiones, echa mano de tu fe y de tu esperanza. Seamos agradecidos sinceramente, Dios merece nuestra gratitud y también nuestra familia, familiares, amigos o hermanos en la fe que se esfuerzan en ayudar a orar por nosotros. Y pensemos en esas virtudes o cualidades para tener mejor armonía con nosotros mismos y con otros. Pablo concluye expresando: “Pongan en práctica lo que de mi han aprendido, recibido oído, y lo que han visto en mi, y el Dios de paz estará con ustedes (v. 9). Espero que si.

Lee Filipenses 4:4-9