EL GOZO ES NUESTRA FORTALEZA
17 mayo, 2024
Los judíos deportados a Babilonia, muchos regresaron a su tierra amada Israel, al ver su capital Jerusalén en ruinas incluyendo el Templo del Dios de Israel se pusieron a llorar, al transcurso de los días comenzaron a reconstruir las murallas, el Templo y sus casas y otras ciudades. Al llegar el mes séptimo todo el pueblo ya estaba establecido. Un día se reunieron todos en la plaza principal de Jerusalén y escucharon toda ley de Dios que el sacerdote Esdras iba leyendo y 12 varones escogidos iban explicando la palabra del Señor y el pueblo respondía con “Amén”. Cuando terminó ...