Ya que han resucitado con Cristo, busquen las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la derecha de Dios. Concentren su atención en las cosas de arriba, no en las de la tierra, pues ustedes han muerto y su vida está escondida con Cristo en Dios. Cuando Cristo, que es la vida de ustedes, se manifieste, entonces también ustedes serán manifestados con él en gloria.
A los Colosenses 3:1-4
Esta carta fue escrita por el apóstol Pablo durante su encarcelamiento en la ciudad de Roma en el año 60 al 62 (4:10). Dirigida a los cristianos que vivían en la ciudad de Colosas. Uno de los propósitos era corregir cierta herejía que había surgido en la ciudad y había penetrado en los creyentes en Cristo. Esa filosofía, era adquirir mayor conocimiento humano. Era judía, exigía la necesidad de la observación de las leyes y ceremonias. Involucraba la adoración a los ángeles como mediadores ante Dios. Además era cristológica. Evolucionó esta herejía y se convirtió en el gnosticismo que niega la divinidad de Cristo Jesús.
La muerte y resurrección de Cristo Jesús nos identifica a nosotros con él y se halla simbolizado en el bautismo que cumplimos. La muerte es simbólica, al salir del agua debemos pensar que ya seremos diferentes en nuestra vida diaria, porque me he identificado con Cristo y debo ser igual a él, tiene que haber una diferencia. ¿Dónde esta esa diferencia? En el hecho de que ahora el cristiano coloca sus pensamientos en las cosas que están arriba. Ya no debe preocuparse por las cosas pasadas y triviales, es decir, no importantes o trascendentes sin significado. Su interés está por las verdades eternas del cielo donde está Cristo. El dijo: “Quiero que donde yo esté ustedes también estén conmigo”.
Mientras tanto los consejos del apóstol Pablo son muy valiosos:
I – Buscar las cosas de arriba. ¿Por qué razones?
- Porque Cristo está en el cielo. Dios está arriba, las cosas espirituales están en él, no debemos vivir bajo las cosas, pensamientos o prácticas de la tierra porque son contaminantes (V. 1, 2).
- Porque hemos muerto a nuestra vida pasada, tenemos una nueva vida por la obra de Jesús el Señor (V. 3).
- Porque cuando Cristo se manifieste nosotros seremos manifestado en él en gloria (V. 4). Resucitaremos por su poder como el resucitó.
Continúa…
Lee Colosenses 3:1-9