Nuestra pasión por la verdad es una expresión inevitable  de nuestra pasión por Dios. Si Dios existe, entonces Él es la vara con que  medimos todas las cosas, Él es la medida de lo que nosotros deberíamos ser y pensar. No preocuparnos por la verdad significa que Dios no nos importa. Amar a Dios apasionadamente es creer en la verdad de Él. El tener nuestra vida centrada en Dios, implica tener un ministerio dirigido por la verdad. 

Meditemos en estos cuatro grupos de pasajes bíblicos acerca de Dios y la verdad:

DIOS ES LA  VERDAD  Romanos 3:3-4  ~  Juan 14: 6 ~  Juan 15:26  

Es un tema indiscutible, porque su palabra lo asevera en diferentes pasajes y los escritores de la Biblia hablan de la verdad de Dios y lo expresaban al pueblo de Israel y en el Nuevo Testamento a creyentes en Cristo Jesús, afirman que Dios no miente, Jesús dijo: Yo soy la verdad.

NO AMAR LA  VERDAD NOS CONDUCE A LA RUINA ETERNA  2 Tesalonicenses 2:8-11

Esto es muy importante a considerar, si Dios no miente, entonces su mensaje es veraz por lo que el ser humano debe recibir esta verdad sobre la salvación de su alma para experimentar la reconciliación con Dios, recibir el perdón de sus pecado y la promesa de vida eterna por medio de Jesucristo quien es la Palabra revelada por Dios.

Continúa…

Lee Romanos 3:3-4,  Juan 14:6,  Juan 15:26, 2 Tesalonicenses 2:8-11