Definición: Deseo; del latín desidium, es la acción y efecto de deseo, anhelar, aspirar, saciar. Del griego epithunita: deseo, se usa en positivo y negativo.  Fuerza, influencia, gobierno, dirección. Consideremos en esta ocasión, el deseo positivo de manera sucinta (Leer para deseo positivo Lucas 22:15 ; Filipenses 1:23; 1Tesalonicences 2:17, etc.).

NUESTRO DESEO

Primeramente Debe Ser Conocer Más a Dios. Él es conocible (Jeremías 9:23,24). Dios es accesible (Salmos 45:18).

Jesucristo vino para darnos a conocer al Padre (Juan 1:1-18), cuando las personas preguntan ¿cómo es Dios?, la respuesta es, como Jesús. Por lo tanto, ver a Jesús es ver a Dios (Colosenses 1:15,19-20). Hay tanto que decir sobre el asunto, lo importante, debemos desear conocerlo más. Es en la Biblia donde podemos descubrir sus perfecciones y saber más de Él.

NUESTRO DESEO DETERMINA LO QUE QUEREMOS

Es posible que tú sigues el propósito de Dios, porque antes que tu nacieras Él ya había diseñado tu vida y la mía. Lo importante es seguir ese diseño, sin Cristo es imposible, de ahí que, lo primero es recibir a Cristo en tu vida, experimentar el nuevo nacimiento que el ofrece y seguirlo. Se nos da para confirmación la salvación el Espíritu de Dios llamado Espíritu Santo. Por lo tanto, debemos depender de Él respecto a la satisfacción de nuestros deseos, buscando en Oración por medio de Cristo nuestras peticiones al Padre. Jesús prometió que todo lo que pidiéramos por medio de Él se nos concedería. Debemos ser sabios al pedir y nuestra petición la perfeccionará el Espíritu Santo.

Respecto a la realización del propósito de Dios, debemos confiar en que Él nos ayudará para que nuestra profesión u oficio que deseamos o que ya tenemos tenga una concordancia con su voluntad, eso incluye toda actividad laboral. Incluye también todo anhelo, como ¿con quién me casaré?, ¿cuántos hijos debo tener), ¿en dónde vivir ciudad o país? y un sin número de asuntos que planeamos y que deseamos la realización de ellos.

Lo importante es que nuestros buenos deseos tengan una dependencia en el Señor, para que al realizarse tengamos éxito y satisfacción, esto glorificará a Dios, a Jesucristo y al Espíritu Santo.

Lee Jeremías 9:23-24 Colosenses 1:15-20