“Hay caminos que al hombre le parecen derechos, pero que acaban por ser caminos de muerte.”
Libro de Proverbios 14:12
La vida nos da oportunidades que son asombrosas, es linda y agradable cuando obedecemos el plan de Dios, cuya voluntad de Él es buena, agradable y perfecta. Dios es infalible nunca se equivoca, ni se equivocará con sus hijos, que es lo mejor para cada uno de ellos.
La vida para muchos humanos es vivir bajo la suerte, otros lo llaman vivir por el destino, otros más viven solamente de acuerdo a sus posibilidades y por sus capacidades, solo un número reducido de seres humanos viven y actúan de acuerdo a un plan diseñado por Dios y se rigen de acuerdo a ese propósito. Como expresa el sabio Salomón, “hay caminos que parecen derechos”. Qué terrible es equivocarse de camino en las relaciones humanas, morales, académicas y espirituales porque lleva a la decepción o al suicidio y en asuntos espirituales viviendo lejos de Dios o no creyendo en Jesucristo, lleva a la muerte eterna. El camino equivocado produce temor y nos controla, inutiliza a la persona, produce cerrazón, paraliza, enferma y no se encuentra una salida satisfactoria. El Salmista lo expresa así: “La vida se me va en angustias, y los años en lamentos; la tristeza está acabando con mis fuerzas, y mis huesos se van debilitando” (Salmo 31:10). Terrible experiencia, pero él no es el único que se ha sentido así, si recuerdas posiblemente tu y yo hemos experimentado esa misma situación.
¿Qué se puede hacer para encontrar el camino correcto? Algunos orientadores dicen que una de las raíces de nuestros males es el medio ambiente donde nos encontramos. Debemos hacer el cambio buscando la ayuda adecuada y la de Dios. Busca en tu pasado, si hay culpa pide perdón a quien corresponda, busca el perdón de Dios por medio de su Hijo Cristo quien pagó con su muerte todas nuestras aberraciones y pecados morales, sé sincero. Así esa decisión te llevará a pedirle a Cristo Jesús que deseas recibirlo en tu vida como tu único Salvador y Señor, porque él es el único camino que te da el verdadero sentido de la vida, es la verdad y la vida y te ofrece vida nueva, y vida eterna con Dios cuando mueras físicamente.
Lee Salmo 31:9-16