En el Libro de Éxodo, escrito por Moisés el líder de Israel, en los capítulos 7 al 11 se describe cada una de las plagas que sobrevinieron al pueblo egipcio ante la negativa del Faraón rey de Egipto. Estas fueron las plagas del uno al diez:
1a. plaga de sangre, en el que todas las aguas del territorio del país se convirtieron en sangre.
2a. plaga de Ranas.
3a. plaga de Mosquitos (piojos).
4a. plaga de Moscas (Tábanos).
5a. plaga Muerte del ganado.
6a. plaga, Úlceras, fue la primera en poner en riesgo la vida humana porque resultó en heridas abiertas (sarpullido ulcerosa), no sólo en la gente sino también en las bestias, una verdadera epidemia generalizada.
7a. plaga, Granizo. Esta plaga y las siguientes son más severas, creando una amenaza económica. Truenos, rayos y granizo, los egipcios que no creyeron y no resguardaron bajo techos a sus esclavos y ganado, perecieron. Los egipcios que escucharon la advertencia de Moisés, creyeron la palabra de Dios y se salvaron ellos y sus animales.
8a. plaga, Langostas. Esta plaga revela otro propósito de los juicios. Aparte de humillar al faraón y traer liberación al pueblo de Israel y este aprendiera que Dios es el Señor todopoderoso y relatarán esta experiencia a sus hijos, nietos y generaciones sucesivas. Este desastre económico de Egipto provocó que los egipcios se percataran de la gran pérdida de vidas tanto humanas como de animales y la destrucción de cultivos y de la vegetación. Era muy alto el costo de continuar reteniendo a los esclavos hebreos, por eso expresaron que Egipto ya estaba destruido. Por lo que faraón se ablandó pero no completamente, su obstinación, terquedad, soberbia y desobediencia no le permitía humillarse ante el Dios de Israel.
9a. plaga, las Tinieblas. Al igual que la tercera y sexta plagas, esta novena plaga llegó repentinamente al extender su vara Moisés en alto. Tres días de extensa niebla en la que no se podía ver o distinguir nada siendo de día, posiblemente una tormenta masiva de arena del desierto, cuya oscuridad y calor hizo que la gente buscara refugio. El faraón llamó a Moisés y le dijo “vayan y rindan culto al Señor, llévense también a sus hijos, pero dejen atrás su rebaños y sus ganados.” Esto era con el propósito que el pueblo de Israel regresara de nuevo a Gosen tierra de Egipto y continuaran siendo sus esclavos. Moisés dijo no, nadie y nada se queda. Faraón se volvió a endurecer y se enojó diciéndole a Moisés, “largo de aquí y si regresas a verme, date por muerto. ¡Bien dicho dijo Moisés a faraón, jamás volveré a verte!”
“Así dice el Señor, -hacia la media noche pasaré por todo Egipto y todo primogénito morirá desde el hijo de faraón hasta el de los esclavos y de los animales. Esta fue la 10a. plaga, la cual se cumplió, todo primogénito murió y en todo Egipto hubo gran lamento incluyendo en el palacio del faraón.
Continúa…
Lee el relato Éxodo 7:6-11:10
