AL HABLAR JESÚS DE LA CASA DE SU PADRE se estaba refiriendo al cielo, el paraíso, el reino de los cielos, la gloria de Dios, una patria mejor, el reino eterno, la herencia eterna, la Jerusalén celestial. (Así lo describen algunos pasajes de la Biblia) Esta es la honestidad de Jesús, cuando dijo: “si no fuera así, ya se los hubiera dicho.” —El hogar del Padre es el cielo. ¿Qué es el cielo? ¿Dónde está el cielo? ¿Anhelas ir al cielo? ¿Cómo llegar al cielo? Son preguntas pertinentes que muchos hacen. El cielo es tema que toda civilización lo tiene presente en su cultura, muchos libros se han escrito, películas, hay una serie de Netflix titulado “El lugar bueno.” (The Good Place) en fin, mucho se ha dicho y continuará diciéndose sobre este lugar.
POR PRINCIPIO EL CIELO ES UN LUGAR PERFECTO, simplemente extraordinario, maravilloso lugar, donde la paz reina. ¿Puedes imaginártelo? Si lees el libro que escribió Randy Alcorn él te pide que eches a volar tu imaginación, porque la lectura de ese libro después de lo que dice la Biblia sobre el cielo y la nueva tierra, te puede cambiar la vida, no serás la misma persona, porque te da una perspectiva maravillosa de lo que es la casa del Padre, la casa de Cristo y nuestra casa. Que es el cumplimiento de la promesa de Dios y del Hijo. Aunque el escritor hace más énfasis en el nuevo cielo y en la nueva tierra, porque volveremos con Cristo en su retorno a la tierra, la cual será restaurada, perfecta para que sea habitada por los hijos de Dios.
LA DESCRIPCIÓN DE LA CIUDAD. Tú lo has leído pero te lo recuerdo… No hay necesidad de luz del sol o de la luna, porque la gloria del Señor lo ilumina todo (Apocalipsis 21:23). El cielo brilla por la gloria de Dios. Así que no hay tinieblas, ni días nublados. No hay violencia, ni sufrimiento, ni lágrimas, ni dolor, ni enfermedad, ni ricos ni pobres, ni racismo, ni clases sociales, ni impiedad, ni maldad, ni injusticia. Es una ciudad perfecta y los que lo habitan son perfectos.
Cuando describes ciertos lugares te expresas muy bien porque fueron bellos y agradables. Lo poco que nos dice la Biblia del cielo es poco, pero es suficiente para desear llegar, nos da descripción de sus calles, de sus habitantes, ángeles, ancianos, criaturas vivientes, el trono de Dios, la gran multitud, los mártires esperando justicia, la música, el coro, la adoración y el Cordero Inmolado.
Continúa…
